«por quanto muchos por tal falsa esperança engañados mueren mal dispuestos: por lo qual en alguna manera non se deue dar mucha esperança al enfermo que conseguira la salud corporal: ca segund dize vn famoso doctor chanceller de Paris: muchas vezes por esta tal falsa consolacion e simulada confiança de salud corporal: jncurre el ombre en cierta condempnacion: creyendo que non ha de morir de aquella enfermedad. Por ende ante de todas cosas sea»