«y ansi le tienen mucha deuocion. Ende se demuestran ahun las pisadas del cauallo d·este señor sant Jeorge de cuya tierra leuamos alguna. § El otro dia de gran mañana que se conto a .xxviij. de agosto de Bethleem partimos y el sol puesto llegamos en vna casa muy grande y solitaria donde stuuimos toda la noche. Ende se acaban ya las montañas y comiença vna llanura bien grande y delectable. Andando este mismo camino passamos acerca»