«manos en sangre tan real y debdosa: pues tan poco perdono a·la triste y tan desdichada madre: la reyna de Aragon hermana de su padre y madre de·los excellentes infantes. Rompida la tregua el rey don Pedro saco su gente y entro en Castilla robando y destruyendo la tierra de su cruel enemigo: y no paro fasta llegar a Medina Celi y poner el real çerco sobre ella: dio le muchos combates y por diuersas»