«mas gruessa y auia tantos señorejos por al derredor tantos caudillos y caualleros que cada dia quasi le dauan rebatos en·el real: estaua entonce la ciudad mas alta y mas fuerte y salian de grandes vezes los moros a pelear con·los del real: mas los nuestros eran tan sueltos: porque los mas eran montañeses: eran tan prestos en·el ferir y tan ligeros en·el alcançar y boluer se: y los peones endemas:»