«del infortunado y de mal aguero es occulto: y el del enemigo es publico: y haueys de saber que no hay criatura de tan buena complexion que si es menguada de algun miembro no mude su stamiento o en peor de·lo acostumbrado o en mucho mejor: lo qual contesce atarde si viue mucho tiempo. Onde suelen dezir aquel prouerbio vulgar. Guardad vos del hombre señalado. E en otro lugar dizen. No te fies»