«que no el monte igneo Ethna que siempre arde y haze destragos en sus vezinos: y qual diluuio tanto mal hazer puede como esto? La dignidad del consulado por la qual Roma huuo principio de sus libertades no la perdiera siendo ella buena: mas la soberbia de·los que regian dio toda la causa etcetera: por·ende parece como sienpre tiene mal para los malos. Despues de todo fue la ciudad de Roma puesta en vn»