«muy llexos de jentilleza: que sino quando en·el auto de·la generaçion con ellos stamos no tengamos el complimjento nuestro, y sto por lo que delante nos falleçe. Mas que entonçes cobramos e poseymos lo que tenemos perdido: y que por·aqueste respeto: no requerjdas: mas requerjdoras continuamente segujr les deujamos. Otra razon de Aristotilles prouada del Egidio Romano diziendo la mujer ser anjmal jmperfeto: y d·aquj vino aquel nuestro enemjgo mortal»