«que tenia en·ella. E non era bien en·el suelo quando el raposo lo tenia ya: e cobdicioso del queso en su presencia lo comio luego. Entonces el cueruo gemio engañado de·la vana alabança con grand pesar que avia: el qual non le aprouechaua. Amonesta esta fabula que njnguno deue oyr nin creer las palabras engañosas e de vana alabança: ca la vana e falsa gloria causa e trahe verdadero enojo e dolor»