«vejez, franco en pobredat, mesurado en abundançia, vmill en grandeza, paçiente en adversidat; mas sobre todo sufriente en la su voluntad. En las Romanas Estorias se lee de·la tenprança, como vna vegada el rey Piramo, oyendo dezir a vn filosofo, el qual avia nonbre Guardia, que dezia asy: aquel que non refrena la su voluntad non es ome, antes a las vestias se deue conparar. Oyendo esto el»