«del otro camino fuerça no faltasse. § Despues de hauer holgado vn poco fuemos descendiendo el monte ayuso contra sol poniente por vn camino muy peligroso fasta que llegamos en vn monasterio que tiene por nombre Quarenta Sanctos: donde nos hecha poca tardança sobimos al monte sancto Synai: passamos por entre vnas espantables rocas que arriba eran duras y fuertes y viendo lo baxo se demostrauan saltos tan profundos que a qualquier spanto pusieran: con esto hazia tan fuerte»