«Dios no nos quiso saquar de·los stremos del honbre: mas del medio de aquel: sinjficando que en amor lealdat y senyorja fuesemos eguales. Mas ellos traspasando el querer suyo nos tienen catiuas sujetas y fuera por tirano poder del domjnyo y libertat nuestra. Y aqueste es el preposito y fin que tanto aquexaua e angustiaua aquella senyora. Mas los maljçiosos honbres sintiendo se de tales culpas culpados con·las cautelas çiençias y artes que tienen»