«no los tomasse desapercebidos: mas que todo estouiesse a recabdo grande y les fuesse defendida la entrada: el rey moro de otra parte que era varon de gran coraçon y esfuerço puso gran guarda sobre su ciudad: repartio por la çerca muchos tiros de poluora y de ballestas de passa: mucha canteria: y su gente bien armada: y a cada torre y puerta principal mando poner su cabdillo a quien houiessen de obedecer los otros»