«delibero la madrastra que el danyo mas que a njnguno de todos tocaua. Olbidando las femenjles fuerças en forma de paie con vna pequenya carta de·la senyora para el enamorado con desygual llanto de·la fija partio: deçendiendo por aquella misma ventana medianera de·las consolaçiones: apartada de toda hutil companya a la çiudat adonde los atribulados enamorados stauan endreço su via. § Del desdichado caso acaeçido y temor del mal presente: de jnfinjtas angustias e»