«mas que venir dentro su puerto: dizen que se llama la dicha montaña Malea o Mala por la malicia de·la dicha gente. Ya quando nosotros todo el dia fuessemos tentando llegar a·la punta y le alcançamos tan presto vn terrible viento dio por nuestras velas que fuemos partidos en tantas partes y tan arredrados que no se podian los de nuestra flota ver vnos a otros: y tal tempestad salio a nosotros que todas las velas»