«region tan habundosa llena de bienes riquezas plazeres deleytes mundanos acodiciando entrar a su madre Jerusalem ya offrecida como su tierra de promission: ante de·la qual tomar çuffrieron tantos trabajos en·el desierto que dexo ende por no ser prolixo. Muy escogida touo la ciudad de Jerusalem Dios poderoso quando la guardo para su pueblo entre las otras naciones del mundo segun pregono despues el Psalmista. Los fundamientos de Dios han sido en los montes sanctos:»