«ved que abominamiento / que por las obras fingidas / desdenyeys nuestro Senyor. § Otras cosas mas terribles / que fazeys e desonestas / podria bien reçitar / pero tanto son orribles / que con palabras honestas / no se pueden proposar / por·ende considerat / refrenando vuestras lengoas / quan bueno es el callar / ca juzgays por calidat / e segunt son vuestras mengoas / teneys pro que reparar. § Pues mi obra concluyendo / requiero vos de»