«tomar otra fasta la cuenta que dicho hauemos. Esta dicha ley darian los brutos y fieres del monte a torpe y fea si hablar supiessen. Y que marauilla si da a·los otros licencia de quatro si el touo quinze mujeres veladas mancebas y sieruas sin alguna cuenta las quales tenia todas encerradas con mucho recelo que nadi ver las pudiesse: y no se detouo en este vicio con lo que hauemos ya dicho: empero ahun adultero»