«suplico e pido: que assi como a·los toros me des cuernos con·los quales me pueda defender e non sea menospreciado de·las otras animalias. Jupiter viendo su desagradescimiento del beneficio de·la grandeza que avia rescibido: quito le quasi del todo las orejas grandes e fermosas de que resplandescia. E sorriendo se d·el dixo. Porque non fuyste contento de aquellas cosas que la natura e fortuna te dio: te quito las orejas»