«prohibicion de comercio de venecianos no entendiendo se en ello su serenjdad. Y como somos admirado non nos haya satisfecho ni respondido cosa alguna sobr·esto y que por quanto el grande danyo que nuestras entradas y sallidas reales han recebido y reciben para nuestros gastos y cargos es ya jntolerable direys y rogareys a su serenidad de nuestra parte tan encargadamente como sabeys vos lo encomendamos y cumple aquella de orden como esta reffeccion se faga porque forçado y»