«quanto complimjento de verdat traen mis palabras para mouer vuestro virtuoso anjmo. Se conformase con el mi pobrezillo pareçer, solo por auer prouado nuestra natura ser jncostante. § La razon. § Vuestras fengidas razones con alguna color de verdat reçitadas no dan a·mj causa de alguna neçesidat vujese de dar ffe en ellas: mas me obligua y fuerça crer lo que las obras y gestos claro testimonjo de vos cada rato me fazen: que el corazon»