«rey don Alfonso de Castilla su suegro: y fecho el honrroso y graue llanto: y vestida la triste marga: las honrras se fizieron muy alta y magnificamente: y luego el serenissimo y pujante rey: y la reyna su amada muger a quien el reyno tan de juro pertenecia se fueron para Castilla: donde concorde y mucho pacificamente el reyno les fue entergado: y ellos recebidos por legitimos y naturales reyes y seƱores: todos»