«tan grande y denodada caualleria los sardos se ayuntaron con su gran capitan el vizconde de Narbona y fueron quando menos dizeseys mil entre todos: y ordenadas sus escoadras la pelea se trauo con tanto esfuerço y valentia y fue reñida tan denodada y brauamente que gran pieça del dia passo que la ventaja no se conoçia: mas andaua tan en balança el fecho que houieron de ser muchos los feridos y muertos: y cayeron fartos de cada»