«que muerta semeiaua. Y depues que sus largas lamentaciones houieron algun·tanto aflaquido su yra muy piadosamente lorando con lagrimas de sus oios me dixo que a su Panphilo buscasse: al qual extensa memoria de sus passiones le hiziesse reptando le sus errores como aquell que no ser amado mereçe. Y pues la senyora Gradissa en sus fauores me enuio y era ya venido el tiempo de·los hauer menester que agora quiere ver mis desseos quanto cobdiciauan»