«mas crescida. Estauamos todos marauillados de tantos millares de torres y mezquitas como en la gran luminaria muy bien se demostraua porque todas ellas tenian enderredor cada tres cercos de lumbres quemando: en tal manera que toda la ciudad resplandecia y era tan clara como de dia. Y esta muchedumbre de torres y lumbres en sus mezquitas siempre se augmenta: porque los moros al tiempo de·la muerte y ahun estando sanos ordenan en sus testamentos muchas»