«en gran conpañia; pues aquel que fabla, se deue guardar de fablar que no diga cosa mala, por bien que sea en lugar secreto. Despues, guarda sy fablas con algun señor, que tu le fagas reuerençia, asy como a el pertañe a su dignidat; que en los omes deues guardar el grado de cada vno, que en vna guissa deue ome fablar a los prinçipes, e en otra a los caualleros»