«va al infierno, e pierde la corona sobirana. Por cierto entonces esta llorando e triste. El que a estas penas es dado, mas quisiera todo el tiempo passado hauer viuido pobre: e no hauer touido riquezas algunas, e con gran razon: ca pregunto: que le aprouecharan entonces los thesoros, ni el monton del oro: quando los peccadores seran enuiados al infierno: para padecer siempre jamas el fuego e escuridad»