«non quieras aqui morar: donde non puedes esperar otra cosa si non la muerte: mas buelue te en·el prado: donde sin peligro e miedo puedes viuir. Mas respondiente el cabrito al lobo: dixo le. Ruego te mi señor que non quieras aver cuydado sobre esta causa: ca ni por tu fialdad: ni por tu mal consejo podras acabar que yo me vaya de aqui: por quanto avn que continuamente me conuenga»