«viniesse a caso que la libertad nuestra tuuiessedes se que sin ninguna verguença nos rogariades assi como nosotros fazemos: y quien se fallaria tan guarnecido de fortaleza que de vosotras defender se pudiesse? Y tanto confio en vuestro sobrado saber que si lo tal acaheciesse nos hariades buscar en los montes y siluas: y ahun agora con tanto peligro y verguença se lo fazeys: y por mi digo que cosas terribles en este caso son passadas y»