«no te de por la buena costunbre, e el honrado por su buen honramiento e su buena criança. Dos honbres no los falle: honbre que de mucho, nin quien demande poco. Vn rey dixo a vn sabio: demanda·me. Dixo el sabio: señor, tu mano es mas çerada que mi lengua de pedir. Preguntaron a vn sabio, por que trabajaua en ganar, pues que era viejo, e dixo»