«en aquella valsa fasta los muslos. Este sandio como estuviesse ende quinze dias fue reduzido en su sentido e sanidad: e assi començo rogar al fisico que lo sacasse de alli pues era bien sano. El maestro lo saco de aquella agua e tormento en que estaua: mas defendio le que non saliesse del corral. El estando obediente por algunos dias segund que le era mandado: el fisico avjendo piedad le dexo salir dende:»