«mas sino que el rey tan catholico defendia siempre el partido del papa: tanto que a·la postre de pauor de·la magestad real houo de pedir paz fasta el papa y partir mano de su fiera cruel y tan sacrilega tirania. Nacio despues d·esto guerra terrible y mortal entre el duque Phelipe Maria y la señoria de Venecia: y entre el rey don Alfonso y los florentines: siguieron de ahi muchas peleas estragos y perdimientos por»