«sin comer çeuada ni salir fuera de su stablo: en·el qual no entre frio alguno: porque seria muy peligroso de algun destempre: y ende le dexen a su voluntad para que se bolque en·la suziedad y sangre que faga. Passados los dias ya dichos echen le el freno: y salga fuera ya del stablo en aquel lugar donde le solian tener arrendado. Entonces lo deuen bien strijolar y limpiar muy bien de la»