«las almas penadas: era la perdicion del tiempo: el qual Dios les daua por su gracia: en cuya poca tardança haurian podido fazer penitencia: que los houiera librado de·las penas del jnfierno. Por·ende dize Hugo de Sancto Victorie. Todos los tormentos del jnfierno sobra el no ver a Dios: e carecer e ser priuado de·los bienes. Que fue en tu mano el ganar los. Obremos pues: e fagamos bien, mientra»