«la madrjna. Porque la materja que agora tractamos no te satisfaze mas yo te tornare al proposito. En aquel paso lo allaras quando tu diziste: como a mj no me queda la persona la voluntat y disposiçion para serujr a otro, tan bueno como el para que se deue de mi contentar? Agora conozco mj hierro: dixo la donzella: y veo que es gran razon que el honbre guarde lealdat a su senyora:»