«vegadas. El segundo dixo: yo puedo tornar de lo que non he dicho, mas que non de lo que he dicho. El terçero dixo: como he dicho, la palabra ha poder en mi, e sy no la digo he poder en ella. El quarto dixo: marauillo·me de aquel que dize la palabra; que sy es preçiada non le es ningun prouecho, e sy non es preçiada viene·le daño»