«que ya la edad le acompañaua y la razon queria que el succediesse. Sintio entonce la reyna el engaño que le hauian fecho sus caualleros en apartar·la del rey: cuyo esfuerço fauor y abrigo la fizieran sin duda siempre reynar si con·el estouiera: mas ni ella mereçia gozar de tan noble y magnanimo acuesto ni menos la deuia tal rey comportar. Fallo se pues sola y qual fallar·se deuia: y todos entonçe fueron»