«rajaua todo sangre: y no podiendo quasi mas a la vez terçera que el cauallero firio al cauallo de·las espuelas y adereço para el peon por le atropellar el cauallo y cauallero dieron juntos en tierra. Salto luego sobre el el peon y començo a le deslazar el yelmo por le despachar: mas el principe le dio vozes y le mando que le dexasse estar que vençido hauia y que abastaua lo fecho: mando le venir»