«seruicio de Dios. Assi que el denodado principe y rey tan nunca vencido sin le vencer vencio al conde: y al rey moro de Huesca sin pelear le priuo de socorro: y luego sin mas detener se boluio sobre la ciudad: y assento su real sobre ella que ya sus merecimientos demandauan corona: y el que tanto por Dios hauia ganado era razon que ganase a·si mismo: que ganasse a·los cielos: mas»