«muchos varones perfetos y justos que mantouiessen la fe cristiana entre los feroces y falsos ydolatras tomando la muerte con diuersidad de muchos tormentos para demostrar el feruor de la fe en su yglesia. Assi contra estos perfidos moros que solo sperando en la potencia de su espada mueuen las batallas ha proueydo con grandes reyes y poderosos para·que defiendan el testamento de·la yglesia. Donde la diuina justa prouidencia que no se engaña en su dispusicion se»