«le el afijado llamando le. Señor señor. E el padrino le dixo: que quieres afijado? El qual respondio: ya salen los puercos. Dixo el lobo: non curemos d·ellos porque son ganados e animales suzios e enojosos: quando los como torçones me fazen: e mas sus sedas o serdas me lysian en·los paladares: de manera que muchas vegadas se me fincan en·ellos. Dende cerca de·la hora de»