«y voluntad propia adereciendo a su malicia. Y esto en dos maneras puede venir: la primera viene porque inclinaron en algun habito dicho vicioso lo qual es malicia y es de costumbre malo de pecar: con esto los tales pierden esperança y como cauallos desenfrenados dan en·los vicios: con lo qual acuerda lo de Jeremias a .xviij. de sus capitulos. Ya desesperamos y andaremos despues de·las nuestras cogitaciones o piensamientos y en·la maldad»