«porque tantos son los vapores: tan espessas y cerradas las nieblas que se leuantan de continuo alla por habondar tan endemas en aguas: y tener tantos sombrios de·las tantas arboledas y bosques que en essas tierras hay: tantas lagunas almarjales estanques y aguas allegadizas y verdes: que las humidades que d·ellas suben son tantas y tan escuras: que entenebrecen y enturbian los ayres: y tornan tan amarillos los cielos: y las estrellas»