«virtuosamente y con tanta clemencia piadad y amor que refuya quanto podia del dar sentencia de muerte. Y quando escusar no lo podia que tan bien queria cumplir con·la justicia mas siempre mezclando la piadad con aquella: era tan clemente y benigno que siempre se adolescia del mismo que condenaua fasta llorar las mas vezes del dolor que sentia del que hauia de matar: y d·esta causa fue siempre por todos amado. Caso la primera»