«rey don Pedro ( como guerrero ) siempre estaua el ojo abierto: y como cauallero mas apercibido que otro ninguno siempre las armas a mano el cauallo ensillado: y todo a punto al estruendo que los françeses fizieron al abrir del postigo de·la fortaleza luego salto en su cauallo: y mando a·los suyos que despachassen y que le siguiessen: y en logar de se yr deteniendo segun la persona que era no curo sino de»