«luego saliendo en tierra sobimos alto en el monte donde la ciudad Rubina staua y fueron oydas por nos las viespras en la yglesia de Santa Eufemia virgen que hay vn collegio: ellas acabadas el principal del dicho templo nos abrio la tumba siquier sepultura de·la dicha virgen cuyo cuerpo santo vimos entero todo y sano: fue por milagro ende trayda de Calcedonia donde la houieron martyrizada cuyo sepulcro pesado y grande nadando passo encima las ondas:»