«gabaonitas que habitauan cabo la ciudad de Jherusalem oyendo la fama de·las muchas fuerças de·los judios pensando como les eran vezinos y se acercauan deliberaron enbiar enbaxada y pedir le paz con gran humildad: los quales dudauan poder acabar lo que pedian por que la tierra no era muy alexos donde las armadas llegar muy bien podieran en poco tiempo: y para el remedio luego entendieron en este engaño. Todos tomaron vestidos muy viejos que de»