«lloro. Oyendo estas palabras el ladron astuto e cubdicioso quito se la capa e poniendo la cerca del el mancebo: descendio en·el pozo a buscar la caldera. E luego como el entro e descendio: el moço tomo su capa con la qual fuyo al monte e alli se ascondio. El ladron tardo mucho pensando de fallar la calderuela de oro: mas conosciendo que non la podia aver: porque non estaua en·el pozo»