«de ordenar lo de su alma y testamento. Y recebidos con mucha deuocion los sacramentos de·la yglesia despidio se con grandes lagrimas de sus fijos encomendando estrechamente al mayor al seruicio ( ante todas cosas ) de Dios el acatamiento de nuestra Señora: cuyo deuoto el siempre fue. La obediencia y la catholica vnion de·la yglesia y el publico beneficio y acreçentamiento de sus reynos. La justicia sobre todo mas siempre mezclada con misericordia .»