«e ajos. Entonces dixeron los escolares: maestro conueniblemente es puesta la lengua: ca vna lengua: se aguza con otra: vn poco despues dixo el señor a Ysopo: trahe aqui otra vianda alguna: e el traxo otra vegada lenguas: los conbidados ya enojados d·ello dixieron: e fasta quando duraran las lenguas. E el philosopho con saña mouido: dixo le: por ventura tenemos otra cosa de comer? E Ysopo»