«guarda·te de mal conpañero, que asy es como espada, que ha fermosa vista e faze mal señal. No te acuestes a rey, sy es loco; nin a la mar, sy es fuerte. No te aconpañes con malos, que quien los aconpaña es grande su pensamiento. Aprende algun ofiçio, por eso que sy vienes a pobreza, non ayas menester de ninguno. Guarda·te de conosçer a ty mesmo,»